Cristiano Ronaldo cuenta los días para conocer a sus dos nuevos hijos, los gemelos Eva y Mateo, nacidos de una madre de alquiler en la Costa Oeste de Estados Unidos. La madre del jugador portugués, Dolores Aveiro, ha cruzado el Océano Atlántico para ser la primera persona que conozca a los pequeños y llevárselos a Madrid esta misma semana para que conviva con el clan en la lujosa urbanización La Finca.
La expectación es enorme, mientras el aspirante a su quinto Balón de Oro se halla concentrado con la selección portuguesa. Fue la cadena lusa de televisión SIC la que avanzó que los niños habían venido al mundo el pasado 8 de junio, en un lugar no desvelado de California o alrededores.
El nacimiento aconteció en la víspera del partido que ganaron CR7 y sus compañeros por 0-3 a Letonia en Riga, decisivo de cara a la clasificación para el Mundial de Rusia de 2018. Además, Portugal pretende hacerse con la Copa Confederaciones, que le llevará precisamente a la ex URSS para enfrentarse a México, a los anfitriones y a Nueva Zelanda, los días 18, 21 y 24 de junio.
En consecuencia, todo lo concerniente a la llegada de los gemelos a España queda en manos de la madre de Ronaldo, persona clave para el cuidado de su hijo«Cristianinho» y ahora igualmente de sus hermanitos, que el chaval de seis años está deseando conocer.
El espectacular delantero ya había confesado a sus allegados que «Cristianinho» no iba a permanecer por mucho más tiempo como su único vástago, pues la experiencia de la paternidad le había gustado tanto que anhelaba repetir. De hecho, ABC se hizo eco de semejante deseo el pasado 23 de marzo, aunque no tardó en comenzar el juego de los despistes para desviar la atención.
Primero Dolores, de 62 años, se apresuró a desmentir tales informaciones, pero el caso es que el proceso ya estaba en curso. Arrancó la pasada Navidad, cuando dejó a su hijo con los suyos en su Madeira natal y él se escapó a Estados Unidos para poner todo en marcha personalmente.
El segundo despiste tuvo lugar inmediatamente después, cuando emergieron unas imágenes de contenido hedonista, pues se veía al goleador bailando desenfrenado con sus amigos en un club de Miami.
Pero todo comenzó a confirmarse el pasado 5 de marzo, una fecha en la que él sorprendió celebrando uno de sus cuatro tantos al Celta en el Bernabéu de una forma muy especial: se puso el balón bajo la camiseta, como suelen hacer los jugadores que van a ser papás.
Se dispararon las especulaciones y entonces se fraguó su relación con Georgina Rodríguez, la joven aragonesa que conoció como dependienta de la tienda de Gucci en Madrid. Sus apariciones públicas junto a ella han ido a más y hasta una revista italiana se aventuró a publicar que la creciente barriga de la chica obedecía a un posible embarazo.
Nada más lejos de la realidad. En cambio, sí se ha cumplido la primicia avanzada a mediados de marzo por la prensa sensacionalista británica, en el mismo sentido que hoy conocemos.
El ansiado alumbramiento doble se produce cuando la revista Forbes acaba de revelar que Cristiano es el deportista mejor pagado del mundo, con más de 86 millones de euros en su haber, por delante del jugador de baloncesto estadounidense LeBron James y del astro del Barcelona, Leo Messi, quien por cierto también tiene un hijo (biológico) llamado Mateo.
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