Valentina Maureira, la niña que le pidió a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, que
le ayudase a «dormir para siempre» falleció este jueves en el Hospital Clínico de Santiago a los 14 años.
Según informa la prensa local, la adolescente murió por complicaciones de la fibrosis quística que padecía desde los 8 años.
El caso de Valentina se conoció cuando le pidió a la presidenta Bachelet que autorizara la eutanasia, aunque poco después, la menor aseguró haber cambiado de opinión.
La fibrosis quística afecta a múltiples órganos, especialmente a los pulmones, y genera periódicas infecciones que deterioran los tejidos.
Es una enfermedad genética incurable que causa la muerte a muchos menores, como el propio hermano de Valentina, que falleció a los 6 años de edad.
Después de que su petición, compartida por la red social YouTube, la propia Bachelet fue a visitar a la niña al hospital.
En Chile, como en la mayoría de los países del mundo, la eutanasia y el suicidio asistido están prohibidos.
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